¿Qué significan los acuerdos firmados en Barbados entre la oposición y el régimen de Nicolás Maduro?

De cara a las elecciones que sobre el papel deben celebrarse el próximo año en Venezuela, el gobierno de Nicolás Maduro y la oposición se sentaron el Barbados para firmar dos acuerdos que marcan el punto de arranque de las elecciones primarias que tendrán lugar el próximo 22 de octubre.

Para llegar a una negociación entre las partes, que dé luz verde a la oposición de arrebatar el poder al régimen y para dar solución a los bloqueos instaurados al gobierno del actual presidente, las partes llegaron a dos acuerdos.

El primer acuerdo parcial es sobre la promoción de derechos políticos y electorales. El segundo acuerdo parcial firmado entre la delegación de Maduro y la Plataforma Unitaria está referido "a la protección de los Intereses vitales para la nación"

Lo anterior, explica el docente de la Facultad de Derecho y Ciencias Política de la Universidad de La Sabana, Andrés Agudelo, supone dos escenarios positivos para el actual régimen y uno positivo y otro negativo para la oposición.

“Tanto el madurismo como la oposición buscan lo mismo: buscan acceder al poder con legitimidad en Venezuela. En el caso del régimen, sostenerlo, en el caso de la oposición arrebatarlo. En ese sentido se plantean dos estrategias. La estrategia del oficialismo venezolano está caracterizada por dividir, por fragmentar a los distintos partidos, fuerzas y movimientos opositores. La estrategia de la oposición es tratar de llegar unidos a una posible elección presidencial”.

En ese sentido, el resultad queda dos a uno, pues si bien a través de los acuerdos, se abre una delgada brecha para la participación de la oposición, dando cabida al levantamiento de algunas sanciones y dando chance al gobierno actual de ‘oxigenar’ el sistema económico, esto se constituye solo como una pequeña luz de esperanza para una oposición con grandes trabas, que enfrenta, como bien lo señala Agudelo, a espacios de participación coptados y un régimen “hábil, supremamente sagaz en saber qué negociar, cuándo negociar, cuándo levantarse de la mesa y cuándo poner condiciones imposibles como la liberación de Alex Saab”.

De Maria Corina Machado y la incidencia de las elecciones en la región

Pese a los acuerdos establecidos, existe una premisa que los analistas destacan en la contienda: el papel que hoy por hoy ejerce María Corina Machado.

Si bien, se estima que su participación en la primarias, será la protagonista, aún esta en duda la posibilidad de que pueda llegar al poder. Su estado de inhabilidad es para muchos el talón de Aquiles de la oposición.

“María Corina Machado hoy es la gran incógnita porque a casi ocho días para las elecciones de las primarias del 22 de octubre es altamente probable no solo que gane las elecciones, sino que arrase. Lo que es improbable es que se le levanten las sanciones que ella tiene, precisamente por todos los artilugios que utiliza el madurismo a través de otros organismos para dar la apariencia de un régimen con controles y con valores. Ella es la gran incógnita porque tiene carisma. Hoy la gente le aplaude la valentía, le aplaude la coherencia y le llenan las calles y las plazas”, explica Agudelo.

Sin embargo, en el remoto escenario de un cambio de gobierno, esto podría significar grandes cambios no solo para Venezuela sino a la vez para la región. Para el experto, esto se ve reflejado en la importancia que tiene el país vecino por sus recursos petroleros y en lo que significa el régimen chavista, con casi 25 años al frente del poder y una diáspora sin precedentes que no solo ha llegado a los países vecinos sino también a Estados Unidos y Europa.

“Si cambia el régimen en Venezuela, el tema migratorio tendrá cambios evidentes, quizás mayores o menores, ya se mirará la medida, pero ahí habrá un impacto, no solo regional, sino hemisférico, finalmente Cuba, Nicaragua, están en un radar cercano a Venezuela (…) Así que con o sin Maduro, independientemente de la decisión política, este es un país que tiene, como cualquier otro, un juego geopolítico particular. A esto habría que sumarle incluso una dimensión global y es que Venezuela hace parte de la OPEP por lo que todo lo que ocurre en Venezuela es fundamental para el mercado mundial del petróleo”, dice Agudelo.

En ese orden de ideas, por ahora lo importante es seguir la evolución de esta contienda que empieza a calentar motores y que si bien puede terminar en un posible fin del régimen, también podría traer como consecuencia la continuación del mismo por seis años más.