¿Qué importancia tiene para el país, y sobre todo para la región, un proceso de reacreditación de la Universidad?

OVP: Estamos en el epicentro de una zona de municipios que se llama Sabana Centro, 11 municipios que tienen un gran impacto regional. La Sabana demostró en estos procesos de Acreditación (en el 2004, cuando se reacreditó en el 2006, la renovación del 2010 y ahora la del año 2017) que estamos haciendo una labor sistemática en desarrollo y en colaboración de la región. Estamos en un proyecto de Sabana sostenible donde tenemos un impacto en proyectos muy significativos. 

Según el ranking de Responsabilidad Social y Gobierno Corporativo de Merco, en el que se encuentran las mejores empresas del país, La Sabana ascendió 27 puestos, ubicándose en el puesto 33.

¿Por qué es importante el impacto social que tiene la Universidad en una región como Sabana Centro?

OVP: El Banco Mundial creó unos indicado- res para desarrollar ciudades sostenibles, y que después el Banco Interamericano de Desarrollo tomó para crear y financiar esos proyectos. A través de Findeter, nosotros adoptamos esos modelos, pero ya no para una ciudad sino para la región Sabana Centro, para los 11 municipios, porque son nuestros y eso nos permite tener un impacto.

Imaginémonos lo siguiente, si sumamos el producto interno bruto de los 11 municipios este equivale al 30% de Cundinamarca, al 1.4% del presupuesto nacional, medio millón de habitantes tiene la región, aproximadamente, pero va a tener cerca de dos millones en el 2050; en menos de 35 años, vamos a tener una población como la de Cali o Medellín.

La Sabana lo que está haciendo con esto es generar e identificar 48 megaproyectos que tienen un beneficio regional como el tren de cercanías, el aeropuerto regional, el centro de alimentos o de abastos y el acueducto municipales. Con el apoyo del periódico El Tiempo y otras entidades, estamos haciendo lo que se llama Sabana Centro Cómo Vamos, parecido al modelo Bogotá o Medellín Cómo Vamos.

Señor rector, durante muchos años hemos visto un crecimiento muy importante en términos de infraestructura en la Universidad y hoy es evidente en la construcción que se adelanta en el campus, ¿qué noticias hay sobre este nuevo edificio?

OVP: Los retos más importantes que tiene la universidad pasan por cosas intangibles porque son el conocimiento, la formación de profesores, identificar las subáreas estratégicas de investigación. Para todo lo anterior se requiere una infraestructura universitaria de talla correspondiente a la altura de la calidad académica que se quiere.

Acerca del Core Currículum dicen los pares: “Constituye un logro importante en la configuración de un núcleo común de formación socio-humanística, el cual es ejemplo para el país” 

Se llama Ad Portas –el nuevo edificio– porque precisamente es el que abre las puertas
de la Universidad a la integración regional y a su proyección internacional 

Este campus es significativamente grande en el contexto nacional, no es el más grande, pero está entre los más grandes de Colombia, cerca de las 100 hectáreas, junto a universidades como la Universidad del Valle, la Universidad Nacional de Colombia, y quizá habrá alguna otra institución en Colombia que tenga 100 hectáreas de campus universitario.

Más que edificios bonitos o cómodos, es la estrategia académica que está detrás de eso. El nuevo edificio se llama Ad Portas, y su nombre nos cautivó cuando el arquitecto Felipe Uribe y su firma lo plantearon. Se llama Ad Portas porque precisa- mente es el edificio que abre las puertas de la Universidad a la integración regional y a su proyección internacional. Por eso parece como un abrazo, tiene esa forma como curva hacia afuera, pero también como curva hacia adentro, entonces abraza hacia adentro y abraza hacia afuera.

Es un edificio que en primer lugar es de protección ambiental. Si ustedes se dan cuenta, el edificio no quita zona verde, el edificio quedó donde estaban los parqueaderos, la zona verde se recupera hacia adentro. También va a existir el teatro del lago, es decir, todos vamos a aprovechar la zona verde.

El edificio obviamente va a tener aulas, pero sobre todo aulas especializadas. Esto significa que tenemos aulas creativas como la “createca”, sitios de innovación y emprendimiento donde los estudiantes de todas las carreras puedan ir y participar y desarrollar proyectos de creatividad.

Precisamente, estuve hablando con el presidente de IBM, porque ellos tienen un proyecto y modelo de aulas creativas y de pronto podamos llegar a una alianza con ellos para incorporar esa tecnología IBM.

Tenemos el gran auditorio de la Universidad con cerca de 600 puestos para hacer grandes eventos, incluyendo la gran apertura. Tiene un Welcome Center, un sitio de bienvenida y de acogida para alumnos, graduados, padres de familia, personas que requieren de consultoría, y gente de posgrados. Hay aulas que son pequeños semiciclos y que sirven, por ejemplo, para salas de audiencias de los estudiantes de Ciencias Políticas y Derecho, o para la metodología del caso, como por ejemplo la que se utiliza en el Inalde, laboratorios especializados que son de servicio para los demás puestos de estudios.

La biblioteca tiene hoy 500 puestos de estudio, en el edificio hay proyectados, más o menos, unos 1.000 puestos para los estudiantes y profesores. Se está pensando en el club de profesores o el Faculty club, de manera que los profesores de planta y catedráticos tengan un sitio amable para ir a estudiar, para compartir, para facilitar la interdisciplinariedad; es decir, el campus tiene también que expresar el arte, crear sitios donde podamos tener expresiones artísticas. Este es un concepto donde la idea del edificio es construir uno que pueda beneficiar a toda la comunidad universitaria.

Y, finalmente, ¿en qué se centran esas oportunidades que arroja el informe, esas sugerencias que nos hacen los pares académicos?

OVP: Nos dijeron que tenemos un buen número de profesores de planta, pero que debemos crecer más, sobre todo en los programas académicos en los que ha aumentado el número de estudiantes. Además, movilizar más recursos externos para la financiación de investigación.

Por otro lado,evaluar los impactos de los programas de proyección social, pues nos dijeron que teníamos potencial para elaborar un sistema de indicadores de cómo esa proyección social que se está haciendo en la región, se pueda mediar de manera que a mediano y largo plazo puedan tomarse decisiones pertinentes en cada proyecto.

Entre los retos fundamentales en los temas de investigación, para mí, está tener los doctorados y llegar a la meta que nos hemos propuesto por carrera. Y no perder el horizonte, no perder la línea de lo que está funcionando.

Hace pocos días, el Prelado del Opus Dei escribió una carta donde plantea su plan de desarrollo a ocho años, allí están las líneas de trabajo de investigación. La Prelatura del Opus Dei nos marca entonces los ruteros en ese plan de desarrollo y, sobre todo, en el tema de la persona, ahí busca aspectos que nosotros debemos interiorizar, meditar y que se deben dar en la línea de lo que estamos trabajando en el Core Currículum, en la formación integral que tenemos en la Universidad.