Expresión de la justicia y los derechos fundamentales

Se enorgullece además al mostrar el libro de su autoría, que considera ha tenido mayor impacto: la Constitución Política de Colombia, comentada y concordada, que ya va en su novena edición, más de 1.200 páginas, un trabajo individual que se ha convertido en texto obligado de consulta en juzgados y facultades de derecho del país.

“Todos los jueves leo todas las leyes y decretos que salen y voy actualizando el texto”, explica, mostrando en su computador la manera como tiene clasificados los temas y cómo alimenta y pone al día la legislación colombiana.Consulta la página de la Presidencia de la República, el Diario Oficial y la base de datos Notinet, -el Noticiero Jurídico Normativo vía Internet, analiza, incluye cambios, elimina lo que ya no es pertinente, y cada dos o tres años publica una nueva edición ampliada, actualizada y comentada.

Otro de sus libros más consultados se titula Preguntas y respuestas de derecho constitucional colombiano y teoría general del Estado. La tercera edición tiene 816 preguntas. “Sé que incluso algunos profesores juegan a Cabeza y cola [concurso de conocimientos] con los alumnos usando las preguntas de este libro. Así me lo han confesado muchos”, comenta. “Incluso alguna vez en la Corte Suprema de Justicia un magistrado que fue presidente me dijo ‘gracias a usted fui magistrado’”. Son libros útiles, que pertenecen a su Colección Cacique de Turmequé.

Y… ¿por qué el Cacique de Turmequé?

La historia se remonta al siglo XVI cuando don Diego de Torres y Moyachoque, hijo natural del conquistador Juan de Torres y de una princesa chibcha, Catalina de Moyachoque, nacido en Tunja, comienza su lucha para reivindicar los derechos de los indígenas y denunciar ante la corte de España los abusos que sus representantes cometían en tierras de Indias contra sus pobladores originales. “Fue el primer defensor de los derechos humanos ante la corte de Felipe II”, dice el abogado Olano; “el cacique logra que España cree la figura de ‘protector general de los indios’”.

Al conocer la historia del Cacique cuando realizaba una especialización en derechos humanos en la Universidad Complutense de Madrid resolvió dedicar su trabajo final a “rescatar a este paisano, el primer abogado mestizo de Colombia”, trabajo que tituló El Cacique de Turmequé, defensor de los derechos humanos en la corte de Felipe II, y fue el inspirador de la creación de su grupo de investigación en la Universidad de La Sabana en 1998, inscrito en Colciencias desde 2002, hoy con Categoría A.

El impacto de los conceptos jurídicos

El grupo está conformado por el doctor Olano y por el padre Vicente Prieto quien, aunque reside en Cartagena actualmente, lidera la línea de investigación en derecho eclesiástico del Estado y Carlos Fernando Gómez, quien fue joven investigador y hoy es docente de la Universidad Surcolombiana de Neiva, con la que hay convenio de investigación, así como con otros estudiantes que han pasado por el grupo pero “digamos que activos como tal están dos personas”, confiesa Olano. Por eso, continúa, “siempre la crítica ha sido que el grupo tiene mucho cacique y poco indio”.

Si bien el padre Prieto maneja los temas de derecho y religión, como el doctor Olano hizo su doctorado en derecho canónico en la Universidad Javeriana, también ha incursionado en el tema siendo autor del Convenio de derecho público con las iglesias cristianas no católicas y la reglamentación de la ley de libertad religiosa. A través del convenio que tiene la Universidad con la Corte Constitucional aporta conceptos en temas eclesiásticos del Estado y con el Congreso de la República, desde 2004 cuando las dos instituciones firman convenio para apoyo legislativo, Olano ha enviado 390 conceptos a los congresistas, relacionados con la adopción de niños por parte de parejas homosexuales, el alcoholismo fetal, el apoyo pedagógico a niños hospitalizados, calidad de la cobertura de la educación, entre otros, los cuales han llegado a incidir en la redacción final de leyes y decretos.

En la Ley de Protección integral a la familia, -ley 1361 de 2009- logró incluir el artículo 8 que se refiere a las familias numerosas, aquellas que reúnen más de tres hijos y dice: Teniendo en cuenta la importancia de la familia dentro de la sociedad, el Gobierno Nacional establecerá las estrategias y acciones necesarias a fin de proteger y apoyar a las familias numerosas. “En la exposición del motivo le agradecen a la Universidad de La Sabana por el estudio”. Otro de los conceptos enviados por Olano sirvió para tumbar un proyecto de ley que pretendía tener dispensadores de condones en establecimientos de atención al público. Trabaja también en la regulación patrimonial de las uniones de parejas del mismo sexo. “Nada de eso suma puntos en el escalafón, ni está en Scopus, ni tiene cuartil; pero tiene impacto social”.

Otra de las fortalezas del grupo, en cabeza del constitucionalista Olano, es el tema de la Acción de Tutela, figura que surge de la Constitución de 1991 y queda plasmado en su artículo 86. De hecho en 1993, cuando entra a La Sabana como profesor de cátedra, la materia que dictaba se llamaba así: Acción de tutela. En ese entonces trabajaba como Oficial mayor de acciones de tutela en la secretaría general de la Corte Constitucional tema que se convirtió en el primero de sus libros.

Los temas no terminan…

Hay dos historias del doctor Olano cuyo trabajo ha tenido que ir recuperando poco a poco porque gran parte de los archivos se perdieron en la inundación de 2011. Uno es el análisis de los textos filosóficos del escritor bogotano Nicolás Gómez Dávila, sobre el cual también ha escrito artículos en revistas científicas analizando su pensamiento sobre la justicia y los derechos fundamentales. Y el otro tema, el derecho en los cuentos infantiles, forma parte de uno de los semilleros de investigación que lideró antes de ese año, basado en los escritos por el danés Hans Christian Andersen. “El cuento puede considerarse un método de caso”, dice. En El patito feo, por ejemplo, analizaron el tema de la discriminación, y en El soldadito de plomo, la discapacidad. “Los analizábamos con los estudiantes y veíamos que los cuentos infantiles tienen derecho penal, derecho policial, civil, administrativo, constitucional”. Desafortunadamente, dice, fue poca la producción de los semilleros y ese es uno de los retos hacia el futuro: reactivar los semilleros de investigación.

La actividad del grupo, en su línea de investigación de Historia de las instituciones, es intensa en estos momentos porque el 6 y 7 de marzo organiza el Quinto Encuentro del Instituto Colombiano de Historia del Derecho, red a la que pertenecen profesores de universidades adscritos a grupos de investigación en la línea de la historia del derecho. Será un momento para continuar examinando la evolución de sentencias, decretos y leyes, y de actualizar de manera colectiva los temas que exigirán conceptos para los futuros proyectos legislativos del país.