Cookies Up, un caso de éxito Alumni Sabana

Cookies Up es el emprendimiento de Carolina Salazar, graduada en

2011 de Administración de Empresas, y de Henry Alberto, graduado de Ingeniería Industrial en 2008. Juntos, crearon en 2017 la empresa, como respuesta a su pasión a las ventas, al diseño y al buen gusto.
 

Todo comenzó cuando Alberto, amante de la repostería, decidió realizar una receta de galletas inspirado por los famosos videos TASTY; de esa manera se creó la primera producción, comenzó como un hobby, pero, luego de eso, decidió compartir este producto con sus compañeros de oficina de aquel entonces. La acogida fue un éxito, razón por la cual su esposa Carolina, quien es una apasionada por los negocios, decidió darle forma a la idea, creándole una marca, una misión, una visión, una identidad corporativa y un valor social a futuro.

Nosotros ofrecemos algo que nadie más ofrece, no solo tenemos nuestra receta única, sino que plasmamos en nuestras galletas fotos, dibujos, figuras, logos corporativos o cualquier cosa que nuestros clientes deseen.


La marca se volvió tan fuerte que, luego de dos meses de haberla creado, específicamente en diciembre de 2017 y gracias a la hermana de Carolina, María Paula, comunicadora social y periodista de la Universidad de La Sabana, concretaron una venta corporativa que impactó positivamente la empresa, dándole un giro a la idea de negocio y centrándose en otro público objetivo, como las empresas, las cuales se interesaban en las galletas para eventos y regalos de fin de año.
 

Luego de este cambio, Cookies Up se reinventó y decidió crear dos nuevas líneas de negocios: la línea artesanal y la línea personalizada. La línea artesanal fue la primera en salir al mercado y, después de un año, crearon la línea personalizada.
 

“En 2018, después de casi un año de funcionamiento, decidimos formalizar nuestra empresa y registrarnos ante la Cámara de Comercio de Bogotá. Nos constituimos como empresa de régimen común y nos enfocamos en el sector corporativo, lo cual disparó nuestro emprendimiento. Nosotros ofrecemos algo que nadie más ofrece, no solo tenemos nuestra receta única, sino que plasmamos en nuestras galletas fotos, dibujos, figuras, logos corporativos o cualquier cosa que nuestros clientes deseen. Y no solo eso, son galletas que saben bien. Muchas veces, las empresas que se dedican a hacer productos con detalles complejos sacrifican el sabor por la imagen, nosotros no”.
 

La llegada de la pandemia generada por el COVID-19 no impactó negativamente a la empresa. Carolina y Alberto pararon la producción de Cookies Up una semana, pero fue estratégicamente planeado para poder tener el tiempo de reinventarse y de crear nuevas estrategias para contrarrestar lo que el virus generó. Hoy en día, siguen en funcionamiento con el apoyo tiempo completo de Carolina y medio tiempo de Alberto.

A futuro, la empresa quisiera poder contar en su planta de producción con trabajadores con Síndrome de Down, así como con otras discapacidades, para de esta manera promover la inclusión laboral de todas las personas.