Estudiantes de La Sabana ganan el segundo puesto en el MIT Hacking Medicine Hackathon
Parecían ser unos días corrientes, pero se sentían diferentes. Había incertidumbre, tensión, esperanza y nervios en el ambiente. Así fueron esas tres jornadas para tres estudiantes de la Escuela Internacional de Ciencias Económicas y Administrativas que, con esfuerzo y dedicación, obtuvieron el segundo lugar en el MIT Hacking Medicine Hackathon.
“El MIT Hacking Medicine Hackathon es un evento organizado por el Massachusetts Institute of Technology, una de las universidades más importantes del mundo, junto a Google Cloud y Apple Health, para generar ideas innovadoras con base en tecnología que den respuesta a desafíos del área de la salud.
Esta Hackathon contó con la participación de tres de nuestros estudiantes Unisabana, quienes después de competir con más de 30 grupos de diferentes países, obtuvieron el segundo lugar”.
Saulo Samuel Linares Vázquez, Luis Enrique Romagni Aurrecoechea y Luqman Eljay Ibrahim, nuestros destacados estudiantes, no eran unos completos extraños entre ellos. Además de tener en su sangre la forma de hablar de Venezuela, su país de origen, compartían gustos e intereses que, a lo largo de sus estudios en La Sabana, les permitieron alcanzar metas y reconocimientos que han dejado huella en el camino.
“Los tres tenemos un punto de vista totalmente diferente”
Para ellos, ser tan diferentes nunca fue un obstáculo. Todo lo contrario: les permitió tener un buen trabajo en equipo porque se complementaron a la perfección como piezas de un rompecabezas. Tenían una meta en común y más de una razón para concursar: creían en sus capacidades profesionales para crear soluciones exitosas.
Además de los estudiantes de la Universidad de La Sabana, el equipo Sana estuvo conformado por estudiantes de diferentes nacionalidades y áreas del conocimiento.
Melanie Tam: Diseñadora de producto - Estados Unidos
Kenneth Hom: Desarrollador IOS - Estados Unidos
Angelina I. Londoño, PhD: Consultora en salud - Estados Unidos
Lucas Campos: Medicina - Brasil
Sana que sana colita de rana
"Sana", como decidieron llamar al grupo conformado por Saulo, Luis, Luqman, tres estudiantes de Estados Unidos y uno de Brasil, tuvo como idea principal lanzar una aplicación para crear un vínculo entre un estudiante universitario con enfermedades mentales y su especialista en el tema. Ellos identificaron un gran vacío en la medicina personalizada en el territorio estadounidense.
Aunque el proyecto nació de unas mentes con un enfoque administrativo, gracias a la comunicación que había en el grupo, "Sana" adquirió un enfoque diferencial e interdisciplinario por la diversidad en los puntos de vista de los integrantes.
No obstante, antes de conformar un grupo tan diverso como Sana, cada estudiante debía elaborar su presentación empresarial (pitch) para mostrar su idea a los demás competidores. Luego, el MIT brindó un espacio de integración entre los jóvenes para que conformaran los grupos oficiales de participación en el concurso.
Diverso y complementario
Aunque Saulo, Luqman y Luis sabían poco de medicina, lanzaron su gran idea al “estrellato” gracias a las diversas habilidades que han adquirido en la Escuela Internacional de Ciencias Económicas y Administrativas: pensamiento computacional, capacidad para trabajar con personas de diferentes disciplinas, innovación y habilidad para desempeñarse en un contexto internacional, entre otras.
Con la integración de conocimientos de diseño, consejería en salud, desarrollo de aplicaciones, administración, negocios, economía y medicina, este equipo diverso y complementario salió adelante para aportar una idea diferencial en su propuesta, y marcar un contraste no solo en el producto sino en la experiencia que ofrecían.
Sana, sacó provecho del componente multicultural para convertirse en un grupo empático y con fácil adaptabilidad entre ellos y el medio. Como resultado lograron tal impacto en su presentación, que en cada paso iban acercándose más a los primeros puestos del MIT Hacking Medicine Hackathon..
Sana comenzó con el propósito de usar la realidad virtual para impactar en el tratamiento de la salud mental. No obstante, la capacidad de ideación y transformación de los estudiantes permitió generar un valor agregado al servicio, con un uso especializado de la realidad virtual para el tratamiento de fobias.
De La Sabana para el mundo
La idea estaba tan clara como para que un niño de cinco años entendiera el propósito del producto, tal como sus profesores de la Universidad solían recalcarles para que su presentación (pitch) tuviera éxito. Sin embargo, los nervios eran difíciles de controlar. Al final del discurso, las dudas e incertidumbres llenaron la cabeza de los estudiantes de La Sabana, porque sabían que estaban compitiendo con personas muy talentosas de todo el mundo.
“Nosotros dimos todo lo nuestro y si uno compite es para ganar y por eso tienes que mentalizarte que vas a ganar”, afirmó Luqman.
Después de un camino lleno de retos por los idiomas de los integrantes, las diferencias en la zona horaria para acordar reuniones y la cantidad de ideas por conceptualizar, la recompensa llegó. Obtener el segundo lugar en el MIT Hacking Medicine fue un éxito, que después de tanto esfuerzo, Saulo, Luqman y Luis agradecen. Esto los anima a seguir generando ideas para impactar en la sociedad.
Huella Sabana
La Sabana no solo ofrece una educación de alta calidad, también permite tener experiencias cercanas a la realidad, ya que comprende las necesidades del futuro profesional de sus estudiantes.
Un claro ejemplo son las materias y espacios que ofrece la Universidad para que los estudiantes de las distintas carreras puedan recibir una amplia formación en diversas áreas, intercambiar saberes y desarrollar habilidades para la integración, la interdisciplinariedad, la inteligencia social y el trabajo grupal.
“No solo te preparan para entender lo que es un modelo de negocio o cuál es la parte financiera”
Saulo destaca que, gracias al doble programa con Administración de Negocios Internacionales y Economía y Finanzas Internacionales, ha encontrado la formación para pensar mucho más allá de los conocimientos básicos que le permiten entender un negocio.
Tener las habilidades para vender una idea, saber comunicarse y analizar datos para comprender diversos ambientes y sectores son habilidades en las cuales La Sabana ha enfatizado para desarrollar en sus estudiantes y que, en este caso, cumplieron un papel fundamental.
Luis resalta que otro punto a favor para ganar el MIT Challenge se basó en el enfoque internacional de Administración de Negocios Internacionales. Este enfoque le ha permitido conocer diferentes conceptos para desarrollar negocios y emprendimientos; además, le ha permitido encontrar un lado humano de los negocios para entender el entorno y las necesidades del consumidor.
“Cada una de las materias de la carrera te aporta algo y te ayuda”
Para Luqman, la calidad en el plan de estudio de Administración de Empresas, resaltando las clases relacionadas con innovación y emprendimiento, es excelente. Las clases relacionadas con innovación y emprendimiento le han permitido explorar nuevas perspectivas e, incluso, ideas locas para reforzar su lado creativo e innovador, clave para ganar el concurso.
Las personas que portan el sello Sabana conocen la importancia del trabajo bien hecho para proponer soluciones que impacten en el entorno. Saulo, Luqman y Luis son ejemplo de este espíritu.
Sin duda alguna, "Sana" es un proyecto que dejará huella en la institución y la sociedad.
Habilidades profesionales para destacar y crear soluciones
En un contexto laboral en el cual la tecnología avanza de forma vertiginosa, los profesionales del futuro deben desarrollar habilidades que les permitan destacar en su entorno y utilizar la tecnología para beneficio de la humanidad.
Las actividades de formación y el currículo de las carreras de la Escuela Internacional de Ciencias Económicas y Administrativas permiten que cada estudiante desarrolle dichas habilidades para destacarse con éxito en el ámbito laboral.
