La Sabana elaboró proyecto de ley para modernizar el transporte terrestre

Este proyecto no asienta más las desigualdades entre el sector público y el privado, sino que reconoce las diferencias de sus agentes y, a partir de estas, propone alternativas novedosas que se ubican en un punto medio.

El proyecto de ley que se presentó sobre la modernización del sistema terrestre individual de pasajeros es el primero en ser elaborado en su totalidad por la Facultad de Derecho y Ciencias Políticas de la Universidad de La Sabana, radicado por el representante a la Cámara, Carlos Eduardo Acosta, del partido Colombia Justa Libres, en una iniciativa que ya se encuentra en el debate público.

Este proyecto nació como una solución jurídica integral que atiende las necesidades legales que generan las plataformas digitales de intermediación de transporte en el mercado nacional; una propuesta que no asienta más las desigualdades entre el sector público y el privado, sino que reconoce las diferencias de los agentes de cada sector y, a partir de estas, propone alternativas novedosas que se ubican en un punto medio.

Pero modernizar este sistema de transporte se requiere más de un frente y varios pasos maestros. Primero, se pretende consolidar un ambiente de justa y sana competencia para todos los actores del mercado del transporte individual de pasajeros y, segundo, resulta esencial proteger de manera efectiva a los consumidores de las plataformas de intermediación de transporte, velando por el cumplimiento de los estándares de idoneidad, calidad y seguridad que se establecen en el proyecto.

La propuesta ha sido trabajada por el Semillero de Investigación de Justicia Económica de la Facultad y la Línea de Justicia Económica de La Clínica Jurídica, bajo la dirección del profesor Johan Caldas, sin duda, como un ejercicio de relevancia práctica. De este equipo hacen parte los estudiantes Catalina Rodríguez, María Gabriela Tovar, Laura Sofía Garzón, Eliza Hernández, Gabriela González, Juan Carlos Castillo, Pedro Rivas, Jessika Puerto, Camila Heredia y Carolina Ortiz.

Para lograr estos objetivos, el proyecto trae consigo diversas propuestas, las cuales podemos reducir a cinco puntos principales:

1. Redefinición y creación de nuevas figuras en materia de transporte

Se implementará la creación de nuevas figuras de transporte intermediado por plataformas abiertas, de manera que no se exija la vinculación a una empresa de transporte para brindar el servicio por parte de los conductores.

2. Principio de digitalización y modernización del sistema de transporte terrestre individual de pasajeros

Por medio de la intervención del Estado, se apoyará la transformación digital mediante el uso de big data para fines públicos, incluyendo la planeación de ciudades, anonimidad de la data y su reglamentación. Además, se buscará la modernización con un impulso continuo al progreso del sector, de forma que se direccione hacia un sistema sostenible, accesible a todas las personas, con calidad y precios razonables.

El proyecto de ley que se presentó sobre la modernización del sistema terrestre individual de pasajeros es el primero en ser elaborado en su totalidad por la Facultad de Derecho y Ciencias Políticas de la Universidad de La Sabana

3. Prohibición de cláusulas abusivas

La prohibición de cláusulas abusivas se verá materializada a través de pólizas que protejan al usuario en el servicio prestado, en caso de pérdidas o daños por accidentes, en el cumplimento de los trayectos establecidos, en el cumplimiento de la reglamentación de la Superintendencia de Industria y Comercio (SIC), y en la prohibición de: tarifas variables, cancelación del servicio sin justificación, valoración de los resultados exclusivo por las plataformas y, finalmente, la prohibición a las empresas de exigir el cumplimiento del pago si estas no cumplieron con las obligaciones.

4. Pólizas, seguros y fondos de responsabilidad para los usuarios, conductores y pasajeros

Se implementarán pólizas de seguros civiles, contractuales y extracontractuales durante la prestación del servicio privado. Además, se llevará a cabo la constitución de un fondo de responsabilidad como mecanismo complementario.

5. Desmonte y compensación del sistema de cupos

Campus habló con el profesor Caldas sobre esta propuesta

¿Cuáles son los factores diferenciales de este proyecto de ley?

Deben resaltarse dos aspectos del proyecto. En primer lugar, que es un proyecto completamente innovador; no solo busca el progreso del sector de transporte terrestre individual de pasajeros, e introduce principios para su evolución y transformación digital, indicando de esta forma la dirección y hacia dónde debe proyectarse el sector, sino que busca la sana y equitativa competencia entre los agentes de este sector, procurando una solución a la problemática actual. En segundo lugar, que logra ser amplio, flexible y adaptable; características esenciales en un mundo globalizado donde surgen de manera constante nuevos modelos de negocio y tendencias de consumo cada vez más disruptivas.

¿Cómo se desarrolló el proyecto?, ¿cuánto tiempo les tomó?, ¿lo llevaron a cabo durante la contingencia?

El proyecto fue desarrollado acudiendo al debate y al consenso de todos los artículos que presentamos. De hecho, contamos con la participación de expertos en el tema, quienes nos ayudaron a expandir nuestros conocimientos y a realizar el mejor proyecto posible. Nos dividimos en grupos de trabajo a partir de los cuales elaborábamos una parte del articulado y, luego, llevábamos este trabajo a la discusión general. Todo el proyecto fue realizado durante la contingencia, es decir,

todas nuestras reuniones fueron virtuales; estas fueron bastante extensas, pues no las terminábamos hasta abordar cada uno de los puntos que necesitábamos desarrollar. Creemos que el trabajo en equipo bien hecho puede lograr resultados increíbles y este proyecto es un ejemplo perfecto de ello.

¿Por qué modernizar todo el sistema de transporte?, ¿por qué hablar de transporte abierto?

En nuestro empeño por diseñar un marco jurídico para modernizar el sector del transporte, nos dimos cuenta de que existe una necesidad latente por incluir nuevos modelos —resultado ineludible de la revolución digital—. También notamos que, ya dentro esos modelos, es fundamental diferenciar cómo operan. No entender las particularidades de cada innovación tecnológica es un error que no podemos permitirnos al plantear la forma de incorporar estas plataformas dentro de la vida en sociedad, pues esto nos impide dilucidar las necesidades y capacidades de cada una.

Por eso, decidimos hablar de las plataformas abiertas y las cerradas, pues, aunque todas las interfaces digitales de transporte prestan esencialmente un servicio de intermediación, cada una funciona de una forma distinta, respondiendo a las necesidades del mercado y a variados modelos de negocio