Denipamun, una iniciativa para gestionar y regular las emociones de niños y adultos
Margarita Arias y Carolina Maldonado han desarrollado el "emociometro", un instrumento que permite identificar y regular las emociones en adultos y niños.
Foto de: Miguel Ruíz
El emociómetro es una herramienta desarrollada y adaptada por Denipamun, una iniciativa que ha impactado 2.500 personas a través de sus estrategias y asesorías psicosociales.
Margarita Arias, graduada de Psicología de la Universidad de La Sabana, junto a su socia Carolina Maldonado, trabajadora social de la Universidad Minuto de Dios. crearon en 2023 “Denipamun”, un proyecto enfocado a la orientación de adultos y niños para la regulación de las emociones, impactando a más de 2.500 personas de Bogotá y la región. A través del “emociómetro”, un instrumento que ayuda a la identificación de sus emociones, se facilita el proceso para tomar consciencia sobre estas a partir de un trabajo autónomo, acompañado por sus creadoras.
Esta iniciativa nace como respuesta a varios tipos de violencia identificados por ambas emprendedoras con base en su experiencia en psicología y trabajo social. Esta problemática se refleja en las 157.899 denuncias de violencia intrafamiliar identificadas por el Instituto Nacional de Salud (INS) en lo corrido del 2023. Su emprendimiento busca dar solución a este tipo de conflictos en las familias para regular sus emociones.
Denipamun ofrece asesorías para familias, colegios y empresas.
Foto de: Margarita Arias
Otros estudios de la psicología en los que se han basado para desarrollar su iniciativa parten de: la teoría del desarrollo psicosocial de Erik Erikson, psicología positiva, teorías del apego, estudios en neurociencia e investigaciones sobre la felicidad y la edad. A partir de ahí han desarrollado las temáticas que abordan en sus talleres y asesorías de acompañamiento a las familias.
“Denipamun, al enfocarse en la gestión de emociones, propone soluciones para abordar estas deficiencias a través de herramientas y recursos que facilitan la comunicación y comprensión de las emociones de manera saludable”, señala Margarita Arias.
Es por esto que decidieron desarrollar el “emociómetro” y su guía socioemocional para que sus usuarios puedan identificar cómo se sienten en un momento especifico al elegir entre una gama de ocho emociones: gratitud, amor, paz interior, alegría, tristeza, enojo, miedo y soledad.
La elección de estas emociones se basa en su importancia en la cotidianidad de las personas, su impacto en el bienestar emocional y las relaciones interpersonales. Su uso aplica en contextos familiares, educativos y corporativos para enseñar a niños y adultos el impacto de sus emociones y cómo estas pueden influir en su comportamiento y decisiones.
¿Cómo se usa el “emociómetro”?
El uso de esta herramienta consiste en realizar varias acciones de manera independiente que posteriormente se pueden socializar en sesiones personalizadas con Margarita y Carolina.
1. Se solicita el producto a través de las redes sociales de Denipamun o a través de WhatsApp (3107682819).
2. El usuario recibe el emociómetro y explora un vídeo en el que se explica su funcionamiento.
3. De manera autónoma, el niño o adulto reflexiona sobre cómo se siente en un momento especifico; posteriormente identifica dicha emoción en la escala del instrumento (ejemplo: tristeza). Luego reflexiona sobre esa emoción y realiza un registro de la misma en una bitácora. Lo anterior permitirá analizar e identificar patrones de comportamiento.
4. A partir de la bitácora se toman acciones para mejorar la gestión emocional, con prácticas de relajación y actividades que aumenten sensaciones positivas o que les permita resolver situaciones problemáticas.
Estas acciones están acompañadas de la guía y asesoría de las expertas cuando el usuario requiera profundizar algún tema relacionado a su progreso. El “emociómetro” incluye un juego de escalera que sirve como complemento a la experiencia educativa, reforzando la comprensión y la gestión de los sentimientos en las personas.
Uno de los objetivos de Denipamun es aportar a la promoción de la paz en sus espacios de impacto. Es por esto que el "emociomentro" contiene una semilla de paz para que sus usuarios la siembren en familia. Las emprendedoras afirman que así se fomenta la armonía, el entendimiento y la resolución pacífica de conflictos. Esto permite que las personas se acerquen a la estabilidad emocional consigo mismas y sus familias.
Denipamun ha aplicado el “emociómetro“ en instituciones educativas de Cundinamarca como el Colegio Cooperativo de Sopó. Su rectora, Claudia Preciado, resalta el impacto de su labor con los niños y miembros de su comunidad educativa: “Quiero destacar el gran trabajo que Carolina y Margarita han realizado en nuestro colegio aportando significativamente a nuestros padres de familia, docentes y estudiantes. Desde su rol personal y profesional han aportado significativamente a nuestra comunidad educativa, promoviendo la transformación y cambio de nuestra sociedad”.
El "emociometro" contiene una escala de ocho emociones: gratitud, amor, paz interior, alegría, tristeza, enojo, miedo y soledad.
Foto de: Margarita Arias
Ambas socias decidieron aplicar a una convocatoria del Centro de Emprendimiento e Innovación Sabana de la Universidad de La Sabana, en búsqueda de implementar mejoras en su estructura organizacional y estrategias de negocios para potenciar su crecimiento y alcance.
Desde 2024 hacen parte de esta incubadora para emprendedores, logrado aplicar en Denipamun aspectos de formación y crecimiento empresarial, como: desarrollo y optimización de servicios; fortalecimiento de la gestión organizacional; expansión de su red de contactos; capacitación y desarrollo del personal, y aumento del impacto social.
“Todo esto nos está permitiendo experimentar un proceso acelerado de crecimiento y profesionalización gracias al acceso a mentorías, formación especializada y redes de apoyo. Estas acciones y medidas no solo están potenciando el crecimiento económico de Denipamun, sino también extienden su impacto social y su contribución a la comunidad, manifiesta Margarita Arias.
Con miras al futuro, Carolina y Margarita buscan continuar con su misión de ayudar a adultos y niños en el manejo de sus emociones. Las emprendedoras anhelan que cada hogar en Colombia tenga un “emociómetro” y que las familias puedan recibir su asesoría en gestión emocional. Su sueño más grande es llevar su proyecto fuera del país y que más personas conozcan la importancia del manejo emocional.
