Tus primeras inversiones

Si solo te hablan de las altas ganancias e ignoran la posibilidad de pérdidas, sospecha, puesto que puede

tratarse de un fraude.

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Invertir puede ser una decisión difícil, sobre todo al iniciar los planes de vida financieros. Si se desea empezar esta labor, hay que ser consciente de que la búsqueda de altas rentabilidades significa asumir grandes riesgos. Si no se quiere afrontar riesgos, entonces habrá que conformarse con menores ganancias.

Con tantas historias sobre estafas, ¿cómo sabes si el dinero que has trabajado va a estar en buenas manos?, ¿es confiable el negocio en el cual estás pensando invertir?, ¿deberías dejar el dinero quieto para no tener pérdidas? María Teresa Macías, profesora del Departamento de Finanzas de la Escuela Internacional de Ciencias Económicas y Administrativas (EICEA), te da seis pautas para comenzar a invertir:

1. Colchón-bank” no es una buena alternativa, porque el dinero quieto se devalúa. Si quieres seguridad, puedes buscar activos de renta fija, con los cuales los riesgos de pérdida sean mínimos y se mantenga el poder adquisitivo de tu dinero, como bonos del Estado. También puedes buscar un certificado de depósito a término (CDT) bancario: aunque tiene más riesgo que el bono del Estado y paga menor rentabilidad, es un activo más popular.

2. Si alguien te motiva a entrar en un negocio que no conoces mucho, antes de entregar tu dinero, averigua: ¿cuál es el origen de las ganancias?, ¿cómo se consiguen? Pide respuestas claras, no debe haber confusiones.

3. Comúnmente, la ganancia de un negocio se da por comprar a bajo precio y vender a un valor más alto y, si es así, ¿sabes qué producto o servicio se compra o vende en ese negocio?, ¿crees que, para ese producto o servicio, efectivamente hay un público interesado?.

4. Si el negocio no genera más recursos o no es confiable ni transparente, es mejor abstenerse de invertir. No es malo dejar pasar una que otra “buena oportunidad”.

5. Si solo te hablan de las altas ganancias e ignoran la posibilidad de pérdidas, sospecha, puesto que puede tratarse de un fraude. No olvides el principio básico: a más rentabilidad, mayor riesgo de pérdida. Un asesor confiable siempre te hará saber las dos posibilidades.

6. Revisa que la entidad que te ofrece el negocio esté regulada por la Superintendencia Financiera de Colombia, ente que puede intervenir y hacer respetar tus derechos como ciudadano en caso de cualquier eventualidad.