Uno de los desafíos más relevantes señalados por los directores escolares noveles en Colombia ha sido la administración de los recursos de las instituciones educativas. Especialmente en lo que atañe al manejo de los recursos públicos de las instituciones estatales y la consecución de recursos en el sector privado. Esto se debe fundamentalmente a que:

1) El perfil de los rectores seleccionados, proviene del ámbito educativo y pedagógico. La formación de la gran mayoría de rectores procede de las licenciaturas y maestrías en educación y no han recibido formación específica como directivos en lo administrativo y en particular en la gestión de recursos financieros, humanos y tiempo. La experiencia que acreditan es más pedagógica, por su trayectoria docente y como coordinadores académicos y de convivencia. En los requisitos de selección no es obligatorio tener formación y experiencia administrativa.
2) Cuando los rectores llegan a las instituciones cuentan con un equipo que los apoya en lo pedagógico, pero no con un equipo en lo administrativo. Para tener un equipo administrativo se necesita cumplir con unos requisitos por ejemplo un número determinado de estudiantes en el sector público.

El manejo financiero representa una tensión permanente porque no coincide la asignación presupuestal con las necesidades reales de las instituciones y los rubros deben ser gastados con base en presupuestos aprobados que no coinciden con la realidad y los proyectos que los profesores quieren innovar. Las normativas para gastos e inversión deben ser aplicadas correctamente porque de lo contrario un error los puede llevar a la cárcel, se requieren conocimientos jurídicos y éticos. La responsabilidad es personal y pecuniaria. La contratación con los recursos públicos se considera compleja, minuciosa, y produce temor. Ellos consideran que la capacitación recibida en programas de inducción no es suficiente, ni el voz, a voz de los rectores con lo cual tratan de solventar los problemas y la falta de formación técnica y ética.

Esta investigación aporta seguimiento a las prácticas en la selección y formación del director escolar novel, muestra inconsistencia en los requisitos exigidos en la selección, la formación inicial de los principiantes y la realidad sistémica de las instituciones. Se necesita estimular la formación específica para el desempeño de los directivos escolares, con comprensiones y explicaciones más completas e integradoras. El estudio le apuesta a un liderazgo escolar que contemple la realidad sistémica de las personas, las instituciones educativas y la sociedad. Consultar el texto completo en https://revistas.ucm.es/index.php/RCED/article/view/61919/4564456552844