Internado clínico, de México y España a Colombia

Estudiantes extranjeros, Facultad de Medicina, Universidad de La Sabana

De izquierda a derecha: Louis Nassar, Paola Rincón Sánchez, Guillermo Muñoz Cedillo y Alfredo Castillo.

Louis Nassar, estudiante de la Universidad Internacional de Cataluña (Barcelona, España), Paola Rincón Sánchez y Alfredo Castillo, ambos del Instituto Politécnico Nacional Escuela Superior de Medicina (México), y Guillermo Muñoz Cedillo, de la Universidad Westhill (México), dejaron sus países de origen para practicar la medicina en Colombia, en la Facultad de Medicina, cursando el internado en la Clínica Universidad de La Sabana.

Ellos, por varios meses, están rotando en los servicios de medicina interna, ginecología, urgencias, pediatría, cirugía general, neurología, cardiología y medicina familiar. “Nuestro papel consiste en explorar, analizar e integrar el problema que presenta el paciente para transmitir la información al médico encargado y tomar decisiones en equipo. Todos los días se realizan revisiones de temas sobre las patologías más habituales de la especialidad y el manejo correspondiente”, explica Louis.

A Paola esta práctica le ha permitido “tener contacto directo con las personas para fortalecer la relación médico-paciente, con la supervisión de un especialista”. Además, señala: “He reafirmado la importancia de explorar e interrogar adecuadamente al paciente para realizar diagnósticos y tratamientos correctos. El diagnóstico clínico siempre estará antes que cualquier tecnología”.

Para Alfredo, esta experiencia los hace crecer en varios ámbitos de sus vidas: “He aprendido mucho académicamente, pero más como persona al vivir solo en otro país”. En Colombia, estos practicantes han encontrado diferencias en cuanto al sistema de salud y a la educación médica: “En México, las jornadas laborales de un residente o de un médico interno de pregrado, cuando tiene un turno, son obligatoriamente de 32 horas continuas; en Colombia son menos”, dice Paola. 

Por su parte, Louis expresa: “Los estudiantes de medicina en España no tenemos contacto tan directo con el paciente por motivos médico-éticos-legales. Aunque se nos deja explorarlo e interrogarlo con la supervisión del especialista y, luego, se nos cuestiona sobre la conducta que debemos seguir, el médico adjunto es quien realiza la atención en su totalidad, así como el manejo de su historia clínica”.

Todos los estudiantes en movilidad internacional concuerdan en que su práctica día tras día se basa en un trato humano. “Nos hemos sentido parte del equipo multidisciplinario de la Clínica y útiles en la atención de los pacientes”, asegura Louis.