Formación integral y entrenamiento quirúrgico, claves para formar a un cirujano

Entrevista a Luis Carlos Domínguez, jefe del Departamento de Cirugía

La Universidad se encuentra capacitando a los profesores en educación médica e investigación educativa de alta calidad, para que sean agentes transformadores de la educación quirúrgica nacional.

La Sabana ha asumido la transformación de la educación quirúrgica en el país, apostando por la formación de un médico integral, eficiente y versátil en el campo de la patología quirúrgica para el sistema de salud. Actaulamente, la Universidad se encuentra capacitando a los profesores en educación médica e investigación educativa de alta calidad, para que sean agentes transformadores de la educación quirúrgica nacional.

Campus conversó al respecto con Luis Carlos Domínguez, jefe del Departamento de Cirugía.

En el campo de la educación ¿cuál es el panorama actual de la cirugía en Colombia

Es un momento interesante porque hay un flujo importante de tecnología, adelantos en el sector de la salud, desde el punto de vista normativo y nuevas oportunidades que apuestan a la calidad en educación, así como transformaciones positivas al interior de las universidades. El advenimiento de latecnología ha traído consigo nuevos desafíos que implican el uso de herramientas como la realidad virtual y la robótica; por eso, debemos modificar la forma cómo enseñamos. También, en la cirugía hay una incursión en la cirugía menos invasiva para el paciente, lo cual requiere que los médicos de hoy deban prepararse con nueva teoría quirúrgica desde el pregrado. Los currículos ahora son por competencia, son más eficientes, concretos y están pensados en términos de responsabilidad social.

¿Cómo está La Sabana frente a los retos actuales?

La Universidad ha hecho esfuerzos por entender la educación médica contemporánea y las tendencias vanguardistas en innovación educativa en el mundo, así como la eficiencia en el diseño curricular y la responsabilidad social. Contamos con instituciones afiliadas al programa que permiten trasladar estas tendencias y nuevos retos a la práctica, con el apoyo de profesores cada vez mejor preparados en su campo de conocimiento y en materia educativa, así como diferentes medios que involucran tecnología de punta para formar médicos que piensen globalmente, pero actúen de acuerdo con las necesidades del país.

Todo ello, se refleja en el diseño de currículos que incluyan la integralidad y el trabajo interdisciplinar, de manera que es posible atender a las necesidades del país y responder de manera confiable y responsable a problemas concretos. También se enfocan en producir conocimiento y formar integralmente a las personas.

¿Cómo se preparan los estudiantes de La Sabana para los retos de la cirugía en Colombia?

Los estudiantes de pregrado toman un curso básico de cirugía, que pone en contexto al médico con la epidemiología quirúrgica del país y su tratamiento, permitiendo que se entiendan los horizontes por explorar y que, ante el advenimiento de la tecnología, se piense de manera consciente, entendiendo que es un ordenador del gasto. Esto supone utilizar apropiadamente la evidencia para ponerla al servicio de sus pacientes, teniendo claro que está tratando con personas, no solo con enfermedades.

Para afrontar los retos, desde octavo semestre, incorporamos la simulación y elementos de entrenamiento quirúrgico mínimamente invasivo. Igualmente nos interesa que los estudiantes resuelvan problemas y no solamente memoricen información.

¿Cómo se garantiza el aprendizaje de cirugía en La Sabana?

Utilizamos la metodología de aula invertida. El uso del componente de virtualidad permite entregar toda la información relevante y practica para el estudiante sobre patologías, evitando la sobrecarga cognitiva. El componente presencial, por su parte, busca generar espacios para discutir casos clínicos, en los cuales los estudiantes propongan, analicen y evalúen la información. Desarrollamos un modelo innovador, no descrito en la literatura, llamado aula invertida extendida, el cual incorpora la simulación clínica al aula invertida, para engranar procesos y generar habilidades en el manejo del paciente traumatizado y el paciente sometido a cirugías de mínima invasión.

¿Qué estamos haciendo desde la investigación en este campo?

Tenemos el semillero de investigación, en el cual preparamos tempranamente a los futuros cirujanos para la transición a posgrado. Las humanidades médicas son fundamentales desde el pregrado; por eso tenemos, desde hace cinco años, contamos con un seminario sobre humanidades médicas y cirugía. El aprendizaje de la cirugía se facilita por medio del conocimiento en la literatura, el arte, la escultura y la historia.

También tenemos algunos proyectos con otras universidades para el desarrollar investigación educativa y quirúrgica, con la colaboración de investigaciones internacionales, desarrolladas en el marco de doctorados y maestrías, en conjunto con universidades de Ámsterdam y de Maastrich, y con grupos de investigación de la Universidad Johns Hopkins.

En el país, realizamos investigaciones en las que participan estudiantes, en temas como: el futuro de la fuerza laboral, elementos que facilitan la escogencia de una carrera quirúrgica, liderazgo transformador entre otros factores que influyen en la incorporación al trabajo.

¿Cómo se preparán los futuros espcialistas en cirugía?

En un programa de cuatro años, basado en competencias, que utiliza el marco de las actividades profesionales confiables y busca concentrar los esfuerzos en lo que debe realizar un cirujano en nuestro país, sin sobrecargarlo de actividades, pero poniéndolo en contexto, para que resuelva problemas de manera confiable en la sociedad.

Con la reforma curricular se tiene contemplado crear un programa básico de investigación quirúrgica, que busca para entregar las competencias de cirugía en laboratorios simulados y proyectos, para brindarles a los residentes  las herramientas necesarias; todo ello se viene realizando en forma conjunta con la Maestría en Educación Médica.

¿Y el futuro de la cirugía?

Apuntamos a crear un observatorio de fuerza laboral de cirugía para monitorear las condiciones del cirujano y del residente, que permita evaluar sus condiciones. En segundo lugar, crear laboratorios de cirugía experimental en modelos animales, en conjunto con otras facultades, para promover trabajo interdisciplinar, investigación de punta y traslacional y la docencia.