Sitios web de hospitales, un canal para combatir la desinformación
La información confiable y de valor relacionada con el COVID-19 es cada vez más demandada por las audiencias, las cuales buscan este tipo de contenidos principalmente en medios de comunicación tradicionales, digitales y en redes sociales. Sin embargo, de acuerdo con Augusto Ventín, director de la Maestría en Periodismo y Comunicación Digital de la Facultad de Comunicación, hay otro canal que podría brindar información muy útil: las páginas web de los hospitales.
Ventín, junto con cuatro académicos en comunicación de Iberoamérica, decidieron plantear una investigación titulada Tracking Websites’ Digital Communication Strategies in Latin American Hospitals During the COVID-19 Pandemic, para entender el uso dado a estos recursos digitales en 58 hospitales de Latinoamérica, 25 de ellos en Colombia: “Quisimos ver de qué manera las webs de los principales hospitales de América Latina estaban usando estos espacios para comunicar sobre la crisis sanitaria, contribuyendo a reducir la desinformación”, aseguró el profesor.
Los hallazgos de la investigación revelaron que la comunicación es entendida de diferente forma en los centros de salud y esto afecta la gestión de los sitios web: “Por un lado, encontramos plataformas que funcionan como directorios o canales unidireccionales de comunicación clínica-paciente. Por otra parte, en otros hospitales, los portales promueven la interacción entre los expertos y usuarios, y se generan contenidos para contribuir al aprendizaje de las enfermedades, entre otras estrategias”.
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Aunque las cifras evidencian que la mayoría de las páginas web analizadas publican información útil para los usuarios, alguna relacionada con la pandemia, los investigadores consideran que es necesario replantear y reformular las estrategias de comunicación digital: “El principal reto que tienen los centros médicos y hospitalarios es entender que los pacientes, ante todo, son personas que deben apropiarse de su salud y de su bienestar. Eso implica que tiene que haber una relación más horizontal entre el profesional de la salud y el paciente. Es fundamental que se generen espacios donde los pacientes sean escuchados, para que los propios profesionales de la salud, especialmente los médicos, sean sensibilizados ante las inquietudes, los miedos y las creencias de los usuarios de la salud”.