Nueva patente sobre conservación de alimentos, de la Facultad de Ingeniería

Hoy, conservar los productos constituye uno de los principales retos para la industria de los alimentos. Una de las opciones para innovar y conservarlos es obtener productos deshidratados o en polvo que aumenten su vida útil. El doctor Fabián Leonardo Moreno, profesor de la Facultad de Ingeniería, logró que la Superintendencia de Industria y Comercio le concediera una patente de invención, gracias al diseño de un dispositivo de secado que genera productos deshidratados, con una presentación en hojuelas o en polvo.

Este equipo permite trabajar a presiones de vacío para aumentar la velocidad de secado, si se quiere, y proteger así las características de calidad de los productos.

 

En la Facultad de Ingeniería se han estudiado diversas tecnologías de secado y su aplicación en varios sectores. Actualmente, existe la infraestructura para comparar el desempeño de cada tecnología, y surgió la idea de diseñar este dispositivo para contar con otra opción en la oferta de tecnologías de secado, incluidas las ventajas en la calidad del producto o de los costos operativos.

“El prototipo, diseñado hace cuatro años, está ubicado en el Laboratorio de Procesos Agroindustriales de la Universidad, donde se ha probado en una diversidad de productos y ha servido de soporte para desarrollar diferentes tesis del Doctorado en Biociencias, de la Maestría en Diseño y Gestión de Procesos, y también del programa de Ingeniería de Producción Agroindustrial. Así, se han explorado más aplicaciones del dispositivo y se ha ampliado su capacidad de uso”, cuenta Moreno.

Este equipo permite trabajar a presiones de vacío para aumentar la velocidad de secado, si se quiere, y proteger así las características de calidad de los productos, tales como la preservación de compuestos termosensibles, nutricionales, funcionales o sensoriales. Asimismo, se deshidratan alimentos líquidos, como pulpas de fruta, lácteos y extractos vegetales; o sólidos, como frutas, harinas y vegetales.

“El producto seco en polvo o en hojuelas facilita su uso como ingredientes industriales en el transporte y almacenamiento, además de su buena preservación y calidad. La vida útil puede cambiar de días en un producto fresco, a meses o años en un producto deshidratado”, asegura Moreno.

Este es un ejemplo de los resultados de investigación que se desarrollan en la Facultad de Ingeniería y que, en algunos casos, por sus características, evolucionan en un producto tecnológico patentable y transferible a la industria. La apropiación exitosa de una tecnología como esta, que parte de un nuevo conocimiento, genera una innovación real. De una manera simple, fácil, segura y confiable, todo este trabajo permite una oferta del equipo o el servicio a las personas interesadas.