Equilibrio entre familia, trabajo y estudio 

Habitualmente, afrontamos un desafío al tener que desarrollar las actividades diarias de forma simultánea. Y ahora, con la propagación del virus COVID-19, estamos enfrentándonos a cambios drásticos en la rutina de la dinámica familiar y laboral. ¿Cómo proceder para que esta coyuntura sea de desarrollo personal y familiar? Ana Margarita Romero, directora del Instituto de La Familia, ofrece las siguientes recomendaciones. La armonización de la vida personal, familiar y laboral tiene un eje clave que comienza por el reconocimiento propio. Algunos autores recomiendan tener en cuenta una estrategia personal y considerar hacia dónde quiere llegarse con la situación. Así que el primer paso es centrar el foco en uno mismo y escuchar para entender las necesidades de los demás, sus preocupaciones y miedos. El inicio es el siguiente: definir una estrategia personal para gestionar adecuadamente el tiempo, porque, la exigencia del trabajo flexible y el teletrabajo demandan un ajuste de los horarios, crecimiento de la autonomía, mucha disciplina y el establecimiento de algunas normas.

 Planear 

Con el objeto de reducir al mínimo el espacio para la incertidumbre, define horarios y tiempos de trabajo para los niños y para los compromisos laborales. También para el descanso y las pausas.

 Programación

Consiste en decidir qué actividades se llevarán a cabo de manera ágil y a cuáles debemos dedicar más tiempo.

 Identificar los ladrones del tiempo 

Debemos establecer un momento para noticias, redes, etc

 Creatividad 

En este momento sí que se necesita una buena dosis de ideas. Ante todo, es necesario involucrar a los hijos con ideas muy ingeniosas.

Algunas ideas para organizarse

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 Autoevaluación 

Revisar al final del día cómo están procediendo con cada tarea. Este aspecto es una oportunidad para crecer en la reflexión personal, “¿Qué hice bien hoy?”, “¿qué pude haber hecho mejor?”.

 Plan de acción 

Identificar las tareas que están haciendo: qué es delegable y qué no, qué ayudas se necesitan de otros (oportunidad para desarrollar el trabajo en equipo), definir qué es prioritario, cuáles actividades pueden posponerse y el orden para efectuarlas.

 Divertirse 

Reírse de las hazañas, y aprovechar juntos y en familia los espacios de las comidas, ya que, usualmente, esos momentos no se tienen.