En agradecimiento al trabajo de los 65 empleados de la Universidad de La Sabana que del 18 de diciembre del 2017 al 8 de enero del 2018 adecuaron y limpiaron 481 oficinas del campus, la Dirección General Administrativa, la Dirección de Operaciones, la Dirección de Sistemas y Tecnologías de Información, y la Dirección de Desarrollo Humano realizaron, los días 26 y 27 de febrero, en el Mesón de La Sabana, un desayuno con el rector Obdulio Velásquez Posada.

“Los empleados pusieron su compromiso con la Universidad por encima de sus intereses y situaciones personales, pues diciembre es la época de los compromisos sociales”, expresó Helberth Tarazona, director de Operaciones.

A propósito de la ocasión, Luis Felipe Ríos, auxiliar de mantenimiento, con 21 años de servicios en La Sabana, dijo: “Lo más relevante era que las personas se sintieran cómodas en la Universidad”. Por su parte, Armando Gómez, director General Administrativo, destacó el valor del trabajo bien hecho y del servicio, ambos vistos como partes de la identidad de la Universidad. “El trabajo es una manifestación de la voluntad de las personas. El servicio en esta Universidad se entiende como dar y recibir libremente”, aseguró.

Mauricio Pérez, coordinador de transporte de La Sabana, quien también hizo parte del equipo, mencionó que la experiencia ayudó a “reconocer la importancia y el valor que tiene el trabajo de todos los auxiliares de mantenimiento y de aseo”. Agradeció que la Universidad se manifestara con ellos y se preocupara por la formación humana a través del trabajo bien hecho.

Asimismo, Adriana Marcela Ordoñez, directora de Desarrollo Humano, felicitó a todos por su dedicación. “El cariño por nuestra comunidad universitaria se vio reflejado en cada detalle. Los animo a seguir dejando el sello que caracteriza nuestras acciones como miembros de La Sabana”, dijo.

Flor María Alarcón, auxiliar de aseo, con 35 años de servicios en La Sabana, resaltó la buena organización de las áreas involucradas y expresó que nunca había recibido un reconocimiento como este. Por su parte, Elen Caucali, auxiliar de aseo, dijo: “Uno no tiene palabras para describir toda la gratitud. Recordamos, como si fuera una película, lo que pasó, pero, cuando vemos el trabajo listo, decimos: ¡somos `verracos!”.