Armenia vs Azerbaiyán: ¿una nueva guerra?

El 27 de septiembre del 2020, Armenia declaró la ley marcial por sus enfrentamientos contra Azerbaiyán. Estas dos naciones han tenido constantes conflictos desde los años 90; sin embargo, durante los últimos días, su lucha se ha intensificado y, a la fecha, ha dejado más de 100 muertos, según la BBC. Estos enfrentamientos han preocupado al mundo entero por la posibilidad de que se declare una guerra directa entre los dos países. Geraldine Bustos, profesora de la Facultad de Derecho y Ciencias Políticas, explica las causas de este enfrentamiento.

Estas dos naciones han tenido constantes conflictos desde los años 90; sin embargo, durante los últimos días, su lucha se ha intensificado y, a la fecha, ha dejado más de 100 muertos, según la BBC.

Según la profesora, el primer elemento que debe considerarse es un aspecto territorial. Hay una disputa entre los dos países por una región denominada Nagorno Karabaj, que territorialmente está ubicada en Azerbaiyán, pero que está bajo el control de los armenios. Durante la Guerra Fría, ambos estados formaban parte de la Unión Soviética, pero, tras la caída de esta, empezó una fragmentación de los estados y eso derivó en el resurgimiento de identidades nacionales. “A inicios de los 90, hubo un fuerte desplazamiento por parte de los armenios que estaban en territorio de Azerbaiyán, pues debían trasladarse al nuevo territorio, lo que hoy en día es el estado de Armenia. Sin embargo, en esta región que señalamos, Nagorno Karabaj se quedó como un enclave armenio en territorio de Azerbaiyán”, explica la profesora.

Además, hay un aspecto étnico relevante. Aunque Nagorno Karabaj está en territorio de Azerbaiyán su composición étnica es de mayoría armenia. Como lo manifiesta Bustos, hay un componente étnico diferencial: “Los azeríes son de mayoría musulmana chiita, mientras que los armenios son cristianos ortodoxos. Entonces, hay un elemento determinante en el análisis, porque ello va a dificultar los elementos de integración. Este territorio es un enclave extranjero en un territorio que no le pertenece”.

Finalmente, otro elemento es el papel de las potencias internacionales en el conflicto. Por un lado, está Rusia, apoyando a Armenia y, por el otro, está Turquía apoyando a Azerbaiyán. “De Rusia, bajo el Gobierno de Putin, hay algunos autores que argumentan que está teniendo una política de reimperialización, es decir, que quiere recuperar los territorios que pertenecían tradicionalmente a la URSS. Turquía se interesa porque es un territorio poblado por una mayoría de origen turco, y de mayoría musulmana, a pesar de que sean chiitas y no sunitas1 como los turcos, eso es lo que haría que entren también en disputa”, explica Geraldine Bustos. Pese a que se conocen con claridad los aliados de cada bando, es improbable que Rusia y Turquía entren en conflicto directo; no obstante, sí apoyarían a cada bando con recursos.

Múltiples países del mundo, como Estados Unidos y Francia, ya se han manifestado respecto a este conflicto, y piden un alto al fuego y que se abra un diálogo entre ambas partes. Así se resolvería el conflicto de manera diplomática, pero hasta el momento ninguno de los dos bandos ha dado una señal de que esto sea una opción.

1. La principal división entre ambas ramas del islam se basa en la discusión histórica sobre quién debía liderar a los musulmanes, después de Mahoma. Los sunitas, la mayoría de la población musulmana, cree que el heredero debería ser elegido según las enseñanzas del profeta. Por otro lado, los chiitas creen que el heredero debía ser Ali, yerno de Mahoma.