Colombia debe afrontar nuevos retos en la logística y el comercio exterior para asegurar un crecimiento económico en el escenario posterior a la pandemia. Finalizando el 2019, el país mostró uno de los mejores desempeños económicos en Latinoamérica. Sin embargo, algunas entidades, como Corficolombiana, proyectaron un crecimiento nulo: del 0 %. Colombia se enfrenta a un entorno digital sin precedentes, en el que es fundamental invertir en infraestructura y en tecnología.

De acuerdo con la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), en este contexto hay que potencializar el flujo del comercio para garantizar el suministro de productos esenciales, porque el comercio es relevante para salvar vidas y medios de vida.

Para Janneth Siabatto, profesora del Departamento de Negociación y Comercio Internacional de la Escuela Internacional de Ciencias Económicas y Administrativas, el mundo y el país afrontan en materia de comercio exterior un reto digital de grandes proporciones.

“Uno de los grandes desafíos para el comercio internacional es el uso de la tecnología y de las ventas e-commerce. Estas cuentan con grandes oportunidades y exigencias, como la adopción de nuevas tecnologías y plataformas digitales, y el desarrollo y fabricación de estas con altos componentes de TIC”, sostiene la profesora Janneth.

Para la experta en comercio exterior, hoy más que nunca las empresas colombianas deben generar alianzas para complementar sus cadenas productivas, “Teniendo en cuenta las normas y reglamentaciones que exige el mercado internacional y que permitan reducir los tiempos, costos e intermediarios en los procesos productivos para ser más competitivos”.

Por su parte, William Guerrero, profesor de la Facultad de Ingeniería, dice que invertir en tecnología es una oportunidad para que las empresas obtengan en el campo de la logística una mayor información sobre las costumbres de compra y las necesidades de los clientes, además del diseño de mejores estrategias de mercadeo. Así, las organizaciones pueden planear mejor sus operaciones de abastecimiento y optimizar el transporte y los inventarios.

Esta crisis nos ha enseñado que deben generarse modelos logísticos colaborativos con otras empresas, para compartir recursos y planear conjuntamente operaciones.

“El impacto potencial de estas tecnologías incluye la reducción de costos de operación de las empresas y un incremento en las utilidades. Además, con un poco de conocimiento de ciencia de datos, puede incluso predecirse el éxito de nuevos productos y servicios”, asegura Guerrero.

Para el experto en logística, esta crisis nos ha enseñado que deben generarse modelos logísticos colaborativos con otras empresas para “Compartir recursos, planear conjuntamente operaciones como el transporte y el almacenamiento de inventarios, para reducir costos y minimizar riesgos. Existen varios casos de colaboración en los que las organizaciones establecen estas relaciones y todas obtienen ganancias al acudir a estos mecanismos”.