El viaje de un lector a lo largo de las páginas de un texto siempre ha sido un recorrido fascinante: olvida la vida real para adentrarse en mundos paralelos. Es una ensoñación, como le sucedió a don Quijote, quien no supo distinguir entre la fantasía y su propio mundo tangible. Sin embargo, esta travesía a lo largo de las palabras, las frases, las oraciones y los párrafos, solo es permitida en la literatura de ficción, pues es muy diferente cuando se busca información o se adquiere conocimiento con el estudio en un campo determinado.

No solo hay un tipo de lectura. En realidad, hay diversos tipos de lecturas y de lectores. En este sentido, es necesario saber que cada texto es un ente único, que se diferencia de los otros debido a su propia individualidad. Es lo que conocemos como el estilo y, por ello, cada autor tiene una forma expresiva diferente.

En sí, la lectura es la interpretación de la lengua, de las formas expresivas del autor, del contenido de un texto y, en muchos casos, del contexto cultural, social y político. Además, es una actividad de índole intelectual, en la que el cerebro, mediante la sinapsis, es capaz de reunir toda la información de tipo gráfico, de la estructura de la gramática de las oraciones, de la información contenida, de lo que no está implícito o de lo que no desea expresar el escritor. También, el lector es capaz de intuir muchas posibilidades y respuestas que no encuentra a lo largo de un escrito. Asimismo, extrae su propio punto de vista y sus conclusiones sobre un determinado tema. Toda esta actividad es lo que se denomina lectura crítica.

La lectura también es una actividad física. Suena extraño, pero, si no se lleva a cabo diariamente, se pierde la capacidad de concentración, así como la facultad de interpretar. Por este motivo, debe realizarse constantemente, pues es importante ejercitar nuestra mente y, sobre todo, construir nuestro propio conocimiento. A partir de la práctica constante, se llegará a ser lo que los teóricos denominan un lector competente. En este sentido, puede decirse lo mismo con la escritura.

 

Por este motivo, la cuarentena es una posibilidad para acercarnos de nuevo a la lectura. Hoy existen alternativas más atractivas de entrenamiento, pero este ejercicio nos permite reconciliarnos con ese libro que hemos dejado para después; y, sobre todo, leer nos ayuda a que nuestra mente se active, a olvidarnos de nuestros problemas cotidianos y a dejar de lado el estrés. Además, si no se es una persona ciento por ciento lectora, es la oportunidad de explorar un bosque lleno de conocimiento, información y fabulación.

Leer nos ayuda a que nuestra mente se active, a olvidarnos de nuestros problemas cotidianos y a dejar de lado el estrés.

¿Qué podemos hacer en el confinamiento?

Consideremos que es la oportunidad de acercarnos de nuevo a la literatura. Por este motivo, presento, a manera de recomendación, una lista de obras y autores conocidos, y de títulos no tan famosos, que te permitirán acercarte a este esencial ejercicio intelectual.

Obras recomendadas 

Novelas en lengua española

  • El camino de “El Dorado”, de Arturo Uslar Pietri.

Literatura venezolana, novela histórica, conquista española, aventureros, río Amazonas, Lope de Aguirre.

  • Fiesta del Chivo, de Mario Vargas Llosa.

Literatura peruana, novela histórica, descripción de dictadores, mundo del Caribe.

  • La Reina del Sur, de Arturo Pérez Reverte.

Literatura española, mafia, narcotráfico, México, realismo.

Novelas de detectives contemporáneos

  • La princesa de hielo, de Camilla Läckberg.

Literatura sueca, investigación, policía, rumbos inesperados.

  • Los perros de Riga, de Hennig Mankell.

Literatura sueca, investigación criminal, conflictos internacionales, crisis política, investigador Kurt Wallander.

  • Un mes con Montalbano, de Andrea Camilleri.

Literatura italiana, Sicilia, investigación criminal, 30 relatos policiales, realismo, comisario Salvo Montalbano.

Crónicas

  • Voces de Chernóbil, de Svetlana Alexievich.

Literatura en lengua rusa, problemas ecológicos, energía atómica, crisis y decadencia política.

  • El Sha o la desmesura del poder, de Ryszard Kapuściński.

Literatura polaca, problemas políticos, Irán, revolución, conflictos internacionales.

  • Perdido en el Amazonas, de Germán Castro Caycedo.

Literatura colombiana, aventuras, selva, conflictos emocionales.

Novelas clásicas

  • Orgullo y prejuicio, de Jane Austen.

Literatura inglesa, realismo, relaciones sociales, amor, compromiso, familia.

  • Los novios, de Alessandro Manzoni.

Literatura italiana, novela histórica, amor, aventuras, vicisitudes, heroísmo.

  • Eugenia Grandet, de Honoré de Balzac

Literatura francesa, novela intimista, realismo, introversión literaria, abnegación.

Novelas del siglo XX

  • La Marcha Radetzky, de Joseph Roth.

Literatura en lengua alemana, novela histórica, caída del imperio austrohúngaro, antecedentes de la primera guerra mundial.

  • El Gatopardo, de Giuseppe Tomasi di Lampedusa.

Literatura italiana, novela histórica, política y literatura, unión italiana siglo XIX.

  • Todo fluye, de Vasili Grossmann.

Literatura rusa, novela realista, campos de concentración soviéticos, dignidad humana.

Literatura infantil

  • La isla del Tesoro, de Robert Louis Stevenson.

Literatura en lengua inglesa, piratas, aventuras, niños, viajes.

  • Charlie y la fábrica de chocolate, de Roald Dahld.

Literatura en lengua inglesa, aventuras, infancia, educación.

  • La historia interminable, de Michael Ende.

Literatura alemana, aventuras, infancia, sueños, fantasía, voluntad.

Clásicos canónicos de la literatura

  • Odisea, de Homero.

Viaje, mitología griega, heroísmo, aventuras, sentido ético.

  • El ingenioso hidalgo don Quijote de la Mancha, de Miguel de Cervantes Saavedra.

Literatura española, fabulación, realidad, ficción, viaje, aventuras, dignidad humana, sentido ético.

Bestsellers

  • Rey de picas, de Joyce Carol Oates.

Literatura estadounidense, relato realista, literatura de ciudad, personajes complejos.

  • El estafador, de John Grisham.

Literatura estadounidense, criminalidad, relato realista, convictos, ámbito judicial.