Los profesores: el ADN de la Universidad

No quieren ir a trabajar a una sala de redacción ni tampoco a una clínica, no han contemplado los despachos de abogados, ni las empresas trasnacionales y desde hace varios años pensaron en ser como sus ejemplos de vida: sus profesores.

Ese es el perfil corriente de los alumnos que hacen parte del programa Semillero de Profesores, el cual propende por el cultivo de las cualidades y los hábitos propios de la labor del docente universitario, en aquellos estudiantes que, de manera libre y voluntaria, manifiestan interés por la vida académica y tienen el perfil para integrar la planta profesoral de la Universidad.

Hasta hace algunos años, la Universidad de La Sabana seleccionaba a sus profesores dentro de sus graduados o dentro de aquellos que, después de muchos años, quisieron compartir su experiencia y conocimiento en las aulas. Ese es el trabajo que hoy y aquí realizan los profesores de cátedra, una figura muy valiosa para establecer el contacto entre la academia y la empresa; pero, tal como en las mejores universidades del mundo, el corazón del quehacer educativo lo integran profesores de planta (tiempo completo), quienes como los “boy scouts” están “siempre listos” para responder a las funciones sustantivas de la Universidad: docencia, investigación y asesoría académica. 

“Las funciones misionales de la Universidad [que siempre han estado centradas en el ser humano] recaen fundamentalmente en los profesores”, afirmó el rector Obdulio Velásquez Posada en una entre- vista concedida a los equipos de Comunicación Institucional y Uni- sabana Radio, a propósito de la reacreditación que recibió La Sabana. Imaginar un campus a ‘Escala Humana’ es casi imposible sin una planta profesoral que tenga dentro de su adn una educación que busque el desarrollo superior de sus alumnos. Ciro Parra, decano de la Facultad de Educación, afirma: “La enseñanza es, en un sentido más profundo, indicarle al aprendiz dónde encuentra conocimientos valiosos y con pretensión de verdad”.  

Hoy, la Universidad de La Sabana cuenta con 370 profesores de planta que contribuyen al fortalecimiento de la docencia, la investigación, la proyección social y la asesoría académica personalizada.

A la fecha, el 86% de los profesores posee altas titulaciones, el 30% (111) cuenta con un doctorado y el 56% (208) con título de maestría. Esta cifra ha ido aumentando en un 16% respecto al 2009, cuando se implementó el nuevo Escalafón de Profesores. Adicionalmente, la rigurosa evaluación que la Universidad hace a sus profesores permite que ellos realicen una profunda reflexión sobre su quehacer cotidiano, lo cual sirve para la toma de decisiones que los ayude a crecer y perfeccionar su labor.

“Los resultados de este proceso le permiten a la Universidad exaltar los logros y méritos alcanzados por sus profesores; definir nuevos frentes estratégicos y objetivos institucionales para el desarrollo permanente de la Universidad”, asegura Luz Ángela Vanegas, directora de Desarrollo Profesoral.

Es así que la comunidad universitaria puede diseñar planes de mejoramiento constante que propicien la excelencia de la docencia y el desarrollo personal del profesor, contribuyendo al aseguramiento del aprendizaje de los estudiantes y la promoción de buenas prácticas.